Café en Jordania

La ceremonia beduina del café en Jordania

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En el caso de que tengas Jordania en la lista de rincones pendientes de visitar, te ponemos sobre aviso: allí beberás un café excepcional, sí, ¡y no lo harás de cualquier manera! Este país todavía prepara el café tal y como lo ordena un ritual beduino.

Mientras no puedas verlo y catarlo en vivo y en directo, puedes leer este post en el que trataremos de acercarte lo máximo posible al café en Jordania y a su ceremoniosa elaboración. ¿Te parece olerlo ya desde aquí? ¡Habrás notado que lleva un poquito de cardamomo! ;)

Los beduinos: maestros del café

Como tal vez ya sabes, los “moradores del desierto” o beduinos son un conjunto de árabes nómadas que viven en los desiertos de Arabia Saudita, Palestina, Siria, Irak, Israel o Jordania.

A este último país llegaron hace cientos de años, instalándose primero en Petra. En la década de 1980 se establecieron en la aldea Umm Sahyoun, convirtiéndose en una de las poblaciones más importantes de Jordania.

Como ves, solo una pequeña parte de los beduinos sigue siendo nómada: lo habitual es que se acomoden en una zona donde puedan cultivar, aunque algunos beduinos combinan los dos estilos de vida y deambulan también por el desierto unos cuantos meses al año.

Sus tiendas (oscuras, bajas, rectangulares y fabricadas a partir de pelo de camello o de cabra) son uno de los símbolos por excelencia de los beduinos. Otro podría ser su elaboración tan especial del café, que hoy es uno de los principales atractivos turísticos de Jordania.

Significado de la ceremonia del café en Jordania

Siguiendo la tradición de la comunidad beduina, los jordanos infusionan sus granos de café cuando tienen invitados en casa o cuando hay que sellar un pacto entre familiares. El café beduino se prepara según las normas de un ritual o ceremonia conocida como ‘jaha’ y que se desarrolla de la siguiente forma:
  1. Los granos de café (100% arábica) se tuestan al fuego en una sartén que alcanza una temperatura de entre 165 y 210 grados centígrados.
  2. Después, los granos se trituran en un almirez (un mortero de metal) produciendo un sonido agradable y musical que los vecinos identifican rápidamente.Es más, es bastante común que el maestro de la ceremonia beduina, mientras muele los granos, entone un cántico tradicional con el que anuncia que está preparando café al resto de su comunidad: “Muele el café en el almirez, ¡oh Suelem!, muele el café en el almirez y deja el fuego encendido y (así) las ricas colinas no desaparecerán alzadas al lado del mismo...”
  3. Ya molido, el café se mezcla con agua y se pone de nuevo sobre el fuego. Cuando hierve, el café se vierte en una cafetera metálica (llamada ‘dallah’) en la que se añade asimismo cardamomo. También es frecuente que el café se haya mezclado antes, durante su molienda, con el cardamomo (a veces, tostado). Además de con cardamomo, el café beduino (y el árabe, en general) se bebe a menudo combinado con otras especias como el clavo o la canela.
  4. En la ceremonia beduina del café, la bebida se sirve en tres rondas. La primera taza de la primera ronda se sirve siempre a la persona de mayor rango de la habitación. El resto de tazas se sirven de derecha a izquierda partiendo de la ubicación de la persona más importante de la sala:
    • La primera cata es la ronda de la hospitalidad. Va acompañada siempre de un mensaje de paz: “Eres mi invitado, te invito a mi café”. Si bebes café en Jordania al estilo beduino ten en cuenta que esta comunidad entiende como una ofensa rechazar esta taza de café (a no ser que se rechace por motivos de fuerza mayor).
    • La segunda es la ronda de la espada. El significado de esta cata es la anulación de cualquier conflicto entre el anfitrión y sus invitados: “Entre nosotros, no hay espada”. Al beber este segundo café, el invitado se compromete asimismo a proteger al anfitrión y a su familia si fuese necesario (esta protección se promete siempre de manera recíproca).
    • La tercera cata se sirve en honor a la alegría y a la amistad. Como es de mala educación tomar más de tres tazas de una misma cafetera, en caso de que el invitado quiera beber más tendrá que esperar a que se prepare otra cafetera y se sirvan otras tres nuevas rondas.

Si al finalizar una ronda el invitado devuelve la taza vacía al anfitrión, este le servirá otra taza. Para comunicarle que está ya saciado y que no quiere beber más tiene que balancear su taza de derecha a izquierda.

En esta ceremonia del café no está bien visto que los invitados soplen para enfriar el contenido de la taza: el café debe servirse y beberse bien caliente. También conviene saber que, aunque durante la ceremonia los huéspedes permanezcan sentados, jamás apoyan sus tazas en el suelo porque este es un gesto muy maleducado a ojos de los beduinos.

Otras curiosidades sobre el ritual del café beduino

Ciñéndote a las pautas anteriores, ya puedes participar en una ceremonia del café en Jordania y ser un invitado de matrícula de honor. ;) Sin embargo, hay muchos otros detalles sobre este ritual del café beduino que vale la pena conocer:
  • Antiguamente, las mujeres no participaban en esta ceremonia y tomaban su café en otra habitación, apartadas del anfitrión y del resto de los hombres. En la actualidad, las mujeres se encargan de la preparación del café para los invitados.
  • Los niños, en cambio, no pueden participar en este ritual del café hasta que se convierten en mozos. De hecho, la primera taza de café que bebe un mozo beduino tiene un gran significado: ellos entienden esta acción como el paso de la infancia a la edad adulta.
  • En ocasiones, el café beduino se sirve acompañado de dátiles o de frutas confitadas.

Sin duda, esta ceremonia beduina del café es muy interesante. A otros rituales del café como el celebrado en Etiopía o el celebrado en Eritrea también les dedicamos un post en nuestro blog:

¡no te los pierdas! ¡Qué gusto nos da compartir conocimientos sobre el universo cafetero! :)

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